BUAP
Formación humana y social
Adrian Romero Rodríguez
23/05/2015
Técnica: Comentario.
Monsiváis, Carlos. "Algunas aproximaciones a la cultura (si ésta se deja)". Cultura mexicana: revisión y prospectiva. Coord. Francisco Toledo, Enrique Florescano et. México: Taurus, 2008. pag. 15-50.
Uno
de los elementos más interesantes que menciona Monsiváis en sus aproximaciones a
la cultura es el que se refiera a la inclusión del cine en el proyecto cultural
del gobierno. Pensar en la inclusión del cine como conformador de la cultura es
un fenómeno redundante (pues pensar al cine desde un punto de vista antropológico
o filosófico como exterior a la culta es imposible), sin embargo el fomento del
cine hace que la cultura se abra a un fenómeno que traspasa la misma cultura nacional.
Aquí hablamos no sólo de discursos que conforman la cultura nacional, sino de
un soporte semiótico diferente el cual ha crecido de forma impresionante y se
ha establecido como uno de los principales.
El
cine al centrarse en los programas educativos y culturales deja de ser un
elemento al margen de las instituciones y se convierte en central. Ya no sólo
es importante para las personas esta clase de discurso sino que el gobierno se
ha dado cuenta y ha reconocido esta importancia. El impulso del cine abre de
una forma muy cuidada lo que debe verse y lo que no. Esta apertura es una
selección, es una aprobación y una organización. La misma sanción por parte de
la institución provoca una segunda sanción la cual es: ¿qué debe ser visto?
¿qué tiene más prioridad? Es decir, la misma apertura y distribución por parte
de las instituciones gubernamentales implica una organización y una
manipulación del saber. Sin la sanción los discursos podían circular de una
manera más libre, y con ella se organiza según un criterio, el cual debe ser el
que menos moleste al estado.
Monsiváis
al hablar de cine no parece hacer ninguna discriminación. No se refiere al cine
de autor ni al de masas. Sin embargo al nombrar títulos de películas parece
referirse solamente a lo que conocemos como cine de culto o de arte. Parece que
Monsiváis piensa en el cine como una puerta para acceder a un campo cultural
que excede al nacional. El cine sería la nueva experiencia que comparten
diferentes culturas (pero que no es la misma ya que el contexto al ser variable
vuelve inestable al significado de las mismas experiencias.) Al pensar en esta
clase de cine lo asocia con la literatura en tanto que ambos pertenecen a la
esfera del arte. A ambos (cine y literatura) los separa de la televisión.
Esta
separación que realiza Monsiváis deja fuera de sus aproximaciones a lo que se
ha considerado el cine hollywoodense, el que se encuentra más cercano a la
televisión. La misma entrada que se abre con el cine nos ha llevado a una
americanización. El cine que más ha entrado a México en las últimas décadas es
el americano. Esta casi indiscriminada apertura ha provocado que México no
consuma otra cosa más que el cine americano el cual ha provocado que los
ciudadanos no deseen sino lo que esta clase de cine quiera. Esta
redireccionalización del deseo hace que los mismos individuos cambien sus
costumbres.
Esto
no nos lleva a pensar que la el cambio en la cultura sea algo negativo. La
cultura es en el tiempo y el cambio es inherente a ella. Pero en donde debemos
poner el acento que este cambio corre en una sola dirección. No es la
diversidad que nombra Monsiváis sino una cambio homogéneo en el cual no hay
disputa ya que todo está muy bien controlado.